Una reciente investigación pone de relieve la brutalidad de la
colonización de la población local de la isla subtropical de Gran
Canaria a manos de la Corona de Castilla, a raíz del hallazgo de los
huesos de un hombre con traumas graves en cabeza, brazos, espalda y
pelvis.
Un equipo de arqueólogos dirigido por Jonathan Santana Cabrera, de la
Universidad Estatal Península de Santa Elena, en Ecuador, ha publicado
en la revista "International Journal of Osteoarchaeology"
una investigación que pretende probar la violencia y la crueldad con
que se emplearon los europeos a la hora de subyugar a los nativos de la
Isla de Gran Canaria durante su colonización en el siglo XV.
En una tumba colectiva de indígenas en Los Acarreaderos, en Gran
Canaria, fue descubierto el esqueleto de un hombre joven que presentaba
un total de 13 heridas, incluida una grave cortadura que le rompió el
cráneo. Las heridas le fueron infligidas por una o más espadas desde
diferentes ángulos de ataque, y se produjeron al mismo tiempo,
causándole probablemente la muerte instantánea. El indígena no pudo en
ningún caso defenderse ya que no contaba con armas de metal como las de
los colonizadores ni tampoco con armadura.
El hallazgo representa una muestra de "la violencia interpersonal
entre los europeos y los nativos que se hizo frecuente en ambos lados
del Atlántico", concluyen los investigadores.
Publicada por RT.